Andalucía pone límites con carácter general al uso de los teléfonos móviles en los colegios e institutos de la comunidad autónoma. Ni en clase ni en el recreo podrán utilizarlo los alumnos. Como toda regla, hay excepciones. Podrá emplearse el móvil para «determinados momentos con fines exclusivamente didácticos y criterios pedagógicos debidamente justificados», como por ejemplo para impartir una asignatura relacionada con las nuevas tecnologías, y por circunstancias personales en los casos de los alumnos que los necesiten por razones de salud o discapacidad.
Todos los detalles figuran en una instrucción que la Viceconsejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional de la Junta ha remitido este lunes a los centros, a los sindicatos que forman parte de la Mesa Sectorial de Educación y a la Asociación de Directores y Directoras de Instituto de AndaluHasta ahora, cada centro tenía un margen de autonomía para restringir el uso del móvil entre su alumnado. A partir de ahora, la Junta de Andalucía establece una regulación con carácter general que, además, no sólo es de aplicación en los colegios e institutos públicos, sino también en los centros privados y concertados, sostenidos con fondos de la Administración autonómica.