En su intervención, destacó la urgencia de implementar un plan de mantenimiento integral, señalando que la situación actual es insostenible y que son los padres y madres quienes están sufriendo las consecuencias de la falta de infraestructuras adecuadas en las escuelas. Sebastián Guerrero, ante la ausencia del señor Gutiérrez, subrayó que los centros escolares carecen de las condiciones básicas, como zonas de sombra y aire acondicionado, lo cual afecta negativamente al entorno educativo. Además, hizo hincapié en que esta problemática no es nueva y que año tras año persisten los mismos problemas, reflejando una situación de decadencia que debe ser abordada de manera urgente.
Por su parte, Pilar Orozco, en representación de la Consejería de Cultura, Juventud y Educación, reconoció la importancia del mantenimiento y la limpieza de los centros educativos, pero señaló que muchos de ellos son antiguos, con más de 80 años de antigüedad, lo que dificulta su conservación. Destacó también los factores externos que contribuyen al deterioro, como el ambiente marítimo y la meteorología adversa. Sin embargo, Orozco informó sobre las numerosas actuaciones llevadas a cabo por el gobierno local para mejorar la situación, mencionando obras de gran envergadura como la reparación de forjados en el colegio Ramón y Cajal, obras de fachadas en el Valle Inclán, y la conservación de cubiertas y fachadas en el colegio Mare Nostrum, todas ellas con un coste superior a 100.000 euros.
Asimismo, destacó que hay proyectos en curso, como la sustitución de puertas interiores en el Mare Nostrum y la rehabilitación de cocinas en el colegio Reina Sofía, que buscan mejorar la calidad de los centros educativos y garantizar un entorno propicio para el aprendizaje. El debate evidenció la preocupación compartida por el estado de los centros escolares en Ceuta y la necesidad de continuar trabajando en su mantenimiento y modernización para asegurar una educación de calidad para todos los estudiantes.