Oriol Junqueras, líder de la candidatura ‘Militància Decidim’, y Xavier Godàs, al frente de ‘Nova Esquerra Nacional’, han sido los protagonistas del Congreso Nacional de ERC celebrado este sábado. Ambos candidatos se disputarán la presidencia del partido en una segunda vuelta programada para el 14 de diciembre, después de que ninguno lograra superar el umbral del 50% de los votos necesarios para una victoria directa.
En esta primera vuelta, Junqueras obtuvo un 48,3% de los votos, mientras que Godàs consiguió un 35,3%. La tercera candidatura, ‘Foc Nou’, liderada por Helena Solà, quedó rezagada con un 12,6%. Esta distribución de votos refleja una clara preferencia por las dos primeras opciones, pero también deja espacio para posibles alianzas o cambios estratégicos de cara a la segunda vuelta.
El proceso electoral ha contado con una participación significativa, ya que un 81,35% de los militantes de ERC, es decir, 6.533 afiliados, ejercieron su derecho al voto de manera telemática. Este alto nivel de participación subraya la importancia de estas elecciones internas para el futuro del partido.
Ambas candidaturas tienen ahora la oportunidad de ajustar sus listas, pudiendo modificar hasta un 50% de sus componentes, aunque deben mantener a su candidato a presidente. Este margen de maniobra podría ser crucial para atraer a los votantes indecisos o aquellos que apoyaron a la candidatura de Solà en la primera vuelta.
La segunda vuelta no solo decidirá quién liderará ERC, sino que también podría influir en la dirección política del partido en un momento crítico para Cataluña. Con temas como la independencia y la relación con el gobierno central en juego, el liderazgo de ERC será clave para definir su estrategia futura.
En resumen, la contienda entre Junqueras y Godàs promete ser intensa y determinante. Ambos candidatos deberán trabajar arduamente para consolidar sus bases de apoyo y convencer a los votantes de que son la mejor opción para guiar a ERC hacia el futuro.
