Este lunes, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, clausura un evento en el Ministerio para la Transición Ecológica con el objetivo de impulsar un amplio acuerdo ambiental. Esta iniciativa surge tras un verano marcado por incendios que afectaron más de 400.000 hectáreas en agosto y luego de la dana que afectó a Valencia el otoño pasado, causando 228 muertos y cientos de miles de damnificados.
El pacto, diseñado para ir más allá de las legislaturas, busca que las políticas destinadas a mitigar y adaptarse al cambio climático se constituyan como políticas de Estado. Durante su visita a los incendios en Asturias el 22 de agosto, Sánchez resaltó que “la sociedad ya no ve el cambio climático como un desafío a futuro, sino como una realidad que impacta en el presente”.
El acto contará con la presencia de la vicepresidenta tercera, Sara Aagesen; el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska; y el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas. Además, asistirán las vicepresidentas María Jesús Montero y Yolanda Díaz, junto a otros integrantes del Gabinete.
El Partido Popular ha rechazado esta propuesta, calificándola como una “cortina de humo” que busca desviar la atención de lo que consideran una gestión deficiente de los incendios. Desde Génova muestran reticencia a firmar un pacto de estas características, aunque otros partidos han manifestado mayor disposición en ocasiones anteriores. Vox, por su parte, niega la emergencia climática y critica que el Gobierno utilice el cambio climático como justificativo ante las catástrofes naturales.
La reciente declaración de 121 zonas catastróficas en todo el país, exceptuando el País Vasco, ha reforzado en La Moncloa la convicción de que España requiere un amplio consenso para hacer frente a un fenómeno que ya afecta la vida cotidiana de millones de personas.
