El Real Zaragoza se encuentra en una etapa complicada en LaLiga debido a un comienzo de campaña que ha generado más incertidumbres que certezas. En las primeras seis jornadas, el equipo registra tres empates y tres derrotas, sin haber conseguido aún una victoria, lo que ha provocado la inquietud en la directiva.
La reciente y dolorosa derrota sufrida en Ceuta ha incrementado las críticas y las preocupaciones dentro del club. Este resultado ha reforzado la impresión de que el equipo no logra despegar y que la mala racha podría poner en riesgo los objetivos establecidos para la temporada.
De acuerdo con fuentes internas, la directiva del club está valorando con seriedad la posibilidad de cesar a su entrenador, Gabi, quien fuera capitán del Atlético de Madrid y reconocido por su carácter competitivo y experiencia. Aunque el técnico ha demostrado liderazgo en el vestuario, los resultados alcanzados no han sido satisfactorios, y la irregularidad del conjunto amenaza la confianza en el proyecto deportivo.
Los dirigentes zaragocistas son conscientes del impacto que una decisión de esta magnitud podría tener en el desarrollo inmediato de la temporada. Por esta razón, analizan cuidadosamente las opciones, considerando tanto las repercusiones deportivas como las institucionales antes de proceder a un eventual cambio en el banquillo.
El porvenir de Gabi permanece incierto mientras la afición zaragocista aguarda una reacción rápida que permita encaminar una campaña que generó expectativas positivas en verano pero que hasta ahora no ha cumplido con las expectativas.
