José Luis Rodríguez Zapatero, expresidente del Gobierno, mantuvo un encuentro privado con uno de los empresarios detenidos en la Operación Plus Ultra, tres días antes de que se realizaran las detenciones por presunto blanqueo de capitales. Esta reunión tuvo lugar en una zona restringida y sin señal telefónica en El Pardo, un dato revelado en exclusiva por Alejandro Entrambasaguas para El Debate, el cual plantea interrogantes sobre la relación de Zapatero con la aerolínea que fue rescatada con 53 millones de euros por el Gobierno.
De acuerdo con la publicación de El Debate, el encuentro se desarrolló el 8 de diciembre, apenas 72 horas antes de que la UCO llevara a cabo las detenciones. El empresario con el que se reunió Zapatero fue Julio Martínez, persona vinculada a Plus Ultra y cliente de la consultora What The Fav S.L., que pertenece a las hijas del expresidente.
Junto a este Julio Martínez, fueron arrestados el presidente de Plus Ultra, también llamado Julio Martínez, y el director ejecutivo Roberto Roselli, todos ellos implicados en la investigación por supuesto blanqueo de capitales. Tras ser detenidos, quedaron en libertad con medidas cautelares durante el fin de semana.
La cita se efectuó en El Pardo, Madrid, a las 8:47 de la mañana. Según relata El Debate, tanto Zapatero como Martínez llegaron en vehículos distintos; un Mini Cooper y un Toyota Land Cruiser oficial del expresidente, respectivamente. Ambos abordaron el todoterreno oficial de Zapatero y se adentraron en un camino de acceso restringido sin cobertura en el Monte de El Pardo. Un trabajador de Patrimonio Nacional habría abierto la puerta para permitirles el paso al área cercada.
La reunión a pie duró alrededor de una hora. Al finalizar, el empresario salió portando una mochila con documentos. Después, ambos se desplazaron al restaurante El Torreón, donde desayunaron por aproximadamente hora y media en un establecimiento que fue asegurado previamente y vigilado por escoltas del expresidente a fin de evitar la presencia de testigos o filtraciones. El dispositivo de seguridad contó al menos con cuatro vehículos oficiales y seis agentes.
El medio indica que estos encuentros se producían con cierta regularidad desde años atrás, aunque su frecuencia disminuyó tras la sospecha de Martínez de estar siendo objeto de investigación. La operación policial coincidió con múltiples registros en la llamada «operación Leire».