Durante el avance del conteo de votos en las elecciones generales de Honduras, Salvador Nasralla, del Partido Liberal, mantiene una ligera ventaja en un proceso que continúa experimentando interrupciones poco habituales. Con más del 80 % de las actas ya contabilizadas, Nasralla encabeza con 1.031.541 votos (40,23 %) frente a los 1.017.614 votos (39,69 %) obtenidos por Nasry Asfura, representante del Partido Nacional.
El miércoles se produjo una nueva interrupción en la publicación de resultados debido a labores de «mantenimiento» efectuadas por la empresa privada responsable del sistema, lo que generó críticas por parte de consejeras del Consejo Nacional Electoral (CNE), quienes señalaron la ausencia de comunicación previa sobre esta medida.
Ana Paola Hall, una de las consejeras, manifestó su inconformidad señalando que «el proceso representa un esfuerzo considerable para la ciudadanía hondureña como para que esto ocurra». Ante esta situación, la publicación de resultados provisionales se trasladó a un centro ubicado en un hotel donde se proyectan los datos preliminares.
En las inmediaciones del hotel se vive un ambiente tenso, con un amplio despliegue de seguridad tras la concentración de simpatizantes de Nasralla que exigen agilidad y transparencia en el conteo.
Nasralla ha pedido a la población mantener la calma, advirtiendo que la definición del ganador podría extenderse varios días debido a impugnaciones por irregularidades en ciertas actas. «Será necesario esperar para observar cuándo surge una diferencia clara en los datos», afirmó, destacando que procedimientos como el escrutinio especial requieren tiempo y atención detallada.
Por otro lado, la votación ha acaparado la atención de diversos sectores, especialmente por la intervención del expresidente estadounidense Donald Trump, que ha sido objeto de críticas. Manuel Zelaya, exmandatario y coordinador del partido Libre, convocó a discutir las acciones consideradas injerencistas y hostiles de Trump durante el proceso electoral.
Zelaya acusó a Trump de intentar influir en el resultado, presionar a los votantes y desestabilizar la voluntad popular hondureña. Esta controversia se intensificó cuando Trump calificó de «comunista» a la candidata del Partido Libre, Rixi Moncada, y pidió públicamente apoyar a Asfura.
El respaldo de Trump a Asfura ha generado tensiones dentro del panorama político del país, especialmente tras declaraciones de Ana García, esposa del expresidente Hernández, quien señaló que esta influencia ha impactado la percepción electoral, afectando la independencia del voto. La situación se complica aún más luego de que Hernández fuera recientemente liberado tras recibir un indulto de Trump, después de haber sido condenado por narcotráfico.



