En septiembre, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, dará inicio al nuevo curso político con una misión oficial al Reino Unido. Allí mantendrá un encuentro en Downing Street con Keir Starmer, primer ministro británico. Esta visita marcará el comienzo de un apretado programa internacional que tendrá como núcleo el otoño, con diversas cumbres multilaterales y reuniones diplomáticas relevantes.
Después del receso de verano, Sánchez retomará su actividad política focalizando sus esfuerzos en fortalecer la posición de España en el ámbito global. La agenda gubernamental para los próximos meses contempla una serie de compromisos internacionales que requerirán la participación directa del presidente en asuntos fundamentales de política exterior.
El desplazamiento a Londres será igualmente la primera reunión bilateral entre Sánchez y Starmer desde que el líder laborista asumiera el liderazgo, lo que confiere un valor simbólico al encuentro y permite ampliar la colaboración entre ambos gobiernos en áreas como la relación post-Brexit, la lucha contra el cambio climático o la cooperación en el contexto europeo.
Con esta gira, Sánchez pretende consolidar el perfil internacional de su Administración en un entorno global cada vez más complejo, donde la diplomacia y la participación activa en foros internacionales son esenciales para proteger los intereses estratégicos de España.
