Tras meses de negociaciones complejas posteriores al Brexit, la Unión Europea y el Reino Unido han llegado a un acuerdo histórico sobre Gibraltar que facilita el avance hacia la eliminación de la verja fronteriza y establece normas fundamentales para la convivencia en la zona.
El acuerdo, que ha sido negociado entre España, Reino Unido y la Comisión Europea, ha finalizado su fase técnica y jurídica y está a la espera de la aprobación del Consejo de la UE y del Parlamento Europeo, último trámite antes de su implementación. Su principal objetivo es asegurar la estabilidad jurídica, económica y social en Gibraltar.
Un elemento clave del acuerdo es la eliminación de la verja que separa Gibraltar de La Línea de la Concepción, lo que permitirá la libre circulación de personas entre este territorio y el espacio Schengen. Para ello, se establecerán controles en el puerto y aeropuerto de Gibraltar, bajo la coordinación de España y Frontex.
Además, el tratado regula la fiscalidad, comprometiendo a Gibraltar a incrementar la transparencia y a evitar prácticas de competencia fiscal desleal. También abarca la lucha contra el blanqueo de capitales y la corrupción, la cooperación policial y judicial, y la protección de los derechos de los trabajadores transfronterizos que cruzan diariamente la frontera.
En términos políticos, el acuerdo no altera las posiciones sobre la soberanía: España mantiene su histórica reclamación sobre Gibraltar, mientras que Reino Unido y las autoridades gibraltareñas conservan su estatus actual. No obstante, se establece un marco de cooperación estable orientado a garantizar la convivencia, la seguridad y el desarrollo económico en la región.
Con este avance, Bruselas, Madrid y Londres cierran una de las negociaciones más delicadas del periodo posterior al Brexit, proporcionando un futuro más claro y seguro para miles de personas que viven a ambos lados de la frontera.


