La OTAN mantiene su rol defensivo, aunque adopta una postura más contundente ante las amenazas planteadas por Rusia. Este miércoles, el secretario general de la Alianza, Mark Rutte, afirmó que la organización «tomará las medidas necesarias para proteger a nuestros ciudadanos y salvaguardar la seguridad de nuestro territorio» tras las recientes declaraciones de Vladimir Putin, quien advirtió que Europa podría enfrentar un conflicto si así lo quisiera.
“La OTAN continúa siendo una Alianza con finalidad defensiva y lo seguirá siendo siempre. Sin embargo, cabe destacar que estamos preparados y dispuestos a actuar para defender a nuestros mil millones de habitantes”, afirmó Rutte en la rueda de prensa con la que concluyó la reunión de ministros de Exteriores en Bruselas.
La percepción de un ambiente prebélico en Europa se vuelve más evidente. Estudios recientes de Países Bajos y Alemania señalan que un posible ataque ruso podría adelantarse a estimaciones previas que lo situaban antes del 2030 y darse en los próximos dos años. Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, describió hace poco la situación como una “guerra híbrida” en el continente.
Rutte insistió en la importancia de incrementar el gasto en defensa: “Los aliados europeos y Canadá están aumentando considerablemente su aportación, un progreso positivo, pero necesitamos hacer más. Todos los miembros deben cumplir con su parte para asegurar que estemos preparados y que la responsabilidad sea equitativamente repartida”, explicó, recordando el compromiso de destinar el 5% del PIB en defensa para fortalecer capacidades clave, como los sistemas avanzados de protección aérea.
Aunque en esta ocasión no se mencionó a España, la OTAN advierte que el país deberá incrementar su inversión más allá del 2,1% del PIB actual, con las primeras evaluaciones a los aliados previstas para el primer semestre de 2026.
Por otro lado, Rutte volvió a resaltar la figura del expresidente estadounidense Donald Trump, a quien calificó como “la única persona capacitada para desbloquear el impasse en la guerra de Ucrania”, a pesar de la ausencia del secretario de Estado, Marco Rubio, en la reunión.
Desde Moscú, el portavoz presidencial Dmitri Peskov evitó comprometer a Putin respecto a las propuestas de paz de Estados Unidos. Aunque Rusia aceptó algunas iniciativas y desestimó otras, el Kremlin aseguró que está dispuesto a seguir con las negociaciones con representantes estadounidenses para alcanzar un acuerdo.
