Aragón se enfrenta a la posibilidad de elecciones anticipadas tras estancarse nuevamente las negociaciones entre el Partido Popular y Vox para la aprobación de los Presupuestos autonómicos. La reunión del martes en Zaragoza entre el presidente aragonés, Jorge Azcón, y el portavoz de Vox, Alejandro Nolasco, concluyó sin avances y con posturas distanciadas.
El consejero de Hacienda, Roberto Bermúdez de Castro, calificó de «inasumibles» varios aspectos de la propuesta presentada por Vox, que refleja el acuerdo recientemente logrado entre ambos partidos en la Comunidad Valenciana. Reconoció que las posiciones están muy distantes y criticó la «rigidez» demostrada por la formación de Santiago Abascal.
Entre los puntos rechazados por el PP se encuentran la total cuestionación del pacto verde europeo y la eliminación de ayudas a entidades que trabajan con migrantes, demandas que en Valencia los populares sí aceptaron. Bermúdez de Castro aseguró que el Gobierno aragonés «cumplirá la ley» en materia de acogida y negó compartir un rechazo absoluto a los compromisos medioambientales europeos.
Vox, por su parte, criticó la aparente incoherencia del PP entre distintas comunidades autónomas. Nolasco llegó a indicar que el proyecto presupuestario del PP “podría ser del PSOE” y acusó a Azcón de comportarse “como un presidente de Podemos”.
PP y Vox acordaron mantener un último encuentro a finales de semana, cita que ambas partes consideran crucial. En caso de no lograr un acuerdo, Jorge Azcón anunciará el adelanto electoral, posiblemente en febrero, según fuentes cercanas a las conversaciones. Esta convocatoria se produciría un mes antes de las elecciones en Castilla y León, previstas para el 14 de marzo.
El PSOE ha intentado tender un puente ante el bloqueo. La líder socialista aragonesa y ministra portavoz, Pilar Alegría, ofreció un acuerdo para aprobar la senda de gasto que incluiría el refuerzo de los servicios públicos y un aumento de la vivienda pública. No obstante, el PP descarta esta propuesta. «Estamos tan lejos del PSOE como de Vox en este momento», insistió Bermúdez de Castro.
Con los diálogos rotos, Aragón se prepara para afrontar unas nuevas elecciones, cuyo anuncio podría ser inminente.
