Las elecciones autonómicas en Aragón se celebrarán el 8 de febrero de 2026, decisión tomada tras el veto de Vox a los Presupuestos regionales. Esta situación ha motivado al presidente de la comunidad, Jorge Azcón, a adelantar los comicios tras dos años y medio en el cargo.
Esta medida se produce después de que Vox anunciara su negativa a respaldar las cuentas para 2026, lo que imposibilita la aprobación del presupuesto regional. Frente a esta circunstancia, Azcón ha optado por convocar elecciones anticipadas con el apoyo completo del PP nacional, incluido Alberto Núñez Feijóo.
El líder del PP en Aragón, emulando la estrategia de María Guardiola en Extremadura, ha elegido reiniciar la legislatura. Esto permitirá evaluar con mayor precisión la influencia de Vox en la comunidad y definir el rumbo político conservador en la región.
En días recientes, Azcón y su equipo intentaron negociar con los portavoces parlamentarios para destrabar el proceso presupuestario, sin embargo, la falta de acuerdo con Vox resultó definitiva. Tras estos encuentros, el líder de Vox, Alejandro Nolasco, defendió que sus propuestas son “estrictamente legales” y descartó conceder un “cheque en blanco” al PP, evidenciando la distancia entre ambos partidos.
Aunque el adelanto electoral ya es oficial, el PP aragonés ha comenzado a preparar su campaña. Por su parte, el PSOE, bajo el liderazgo regional de Pilar Alegría, observa con atención cómo los comicios configurarán el próximo mapa político en Aragón.
Los aragoneses acudirán a las urnas el 8 de febrero en un contexto marcado por la ruptura de acuerdos y la tensión entre las principales formaciones conservadoras.