La administración autonómica asignó una partida de 125.000 € para la reforma del Barranco del Poyo, pero hasta la fecha no se ha utilizado ninguna cantidad de ese presupuesto, según los datos recientes de ejecución presupuestaria. Esta situación refleja las complicaciones que existen para realizar obras urgentes en cauces y barrancos tras episodios de lluvias intensas.
El proyecto para el Barranco del Poyo, un cauce especialmente sensible y que suele estar presente en los avisos de riesgo por precipitaciones fuertes, contaba con esos 125.000 € dentro del presupuesto autonómico de este año. No obstante, actualmente, la ejecución es del 0 %, lo que implica que no se ha iniciado ninguna obra con ese importe.
Este problema no afecta únicamente a esta partida específica. En otros programas destinados a infraestructuras para el mantenimiento de cauces, ramblas y barrancos, la ejecución presupuestaria también es muy baja. Por ejemplo, en las acciones referidas a la “eliminación de vegetación en cauces” apenas se ha gastado poco más del 1 % del presupuesto asignado hasta el 30 de septiembre.
La conselleria encargada de Medio Ambiente y Agua ha explicado que parte de la demora se debe a que algunas intervenciones dependen de fondos transferidos desde el Gobierno central, cuya recepción y gestión ha requerido más tiempo. Además, la alta demanda de maquinaria especializada ha provocado retrasos en la contratación y en la movilización de equipos. En el caso del Barranco del Poyo, señalan que el proyecto se acordó negociar con el Estado y que parte de su ejecución será en colaboración con otros niveles administrativos.
Sin embargo, la demora en la ejecución ha generado críticas desde sectores de la oposición, que advierten que la no utilización de estos fondos, destinados a infraestructuras con una función preventiva frente a episodios de lluvias fuertes, puede incrementar el riesgo para las áreas involucradas.
La reforma del Barranco del Poyo forma parte también de iniciativas más amplias de restauración hidrológica y paisajística, cuya tramitación lleva varios años en estudio. A pesar de que la inversión está contemplada en el presupuesto, el retraso en su desarrollo plantea dudas sobre la capacidad de respuesta ante alertas de inundación, sobre todo en zonas donde estos cauces tienen un impacto directo.
En resumen, existe una brecha significativa entre los fondos asignados y los ejecutados, lo que puede afectar tanto a la prevención de riesgos meteorológicos como al mantenimiento de los espacios naturales. Mientras tanto, los 125.000 € destinados al Barranco del Poyo continúan pendientes de materializarse en obras concretas.



